martes, 19 de febrero de 2013

Reseña Las ventajas de ser un marginado

Somos infinitos.

Las ventajas de ser un marginado es de las películas más entretenidas, magnéticas y profundas que puedes encontrarte en la cartelera. Logan Lerman sorprende, Ezra Miller fascina y Emma Watson maravilla.





Director: Stephen Chbosky.
Intérpretes: Logan Lerman, Ezra Miller, Emma Watson, Mae Whitman, Kate Walsh, Dylan McDermott, Melanie Lynskey, Nina Dobrev, Johnny Simmons, Joan Cusack, Paul Rudd.
Año: 2013.
Duración: 103 min.
Género: Drama romántico adolescente.

Sinopsis: Charlie (Logan Lerman) es un chico tímido y marginado que escribe cartas a un desconocido para contarle su vida estudiantil, en las que abarca temas como la amistad que entabla con dos chicos algo excéntricos, Patrick y Sam (Ezra Miller y Emma Watson), los conflictos familiares, las drogas y el sexo. Charlie tiene que afrontar a lo largo del curso su primer amor y las complicaciones que conlleva, el suicidio de su primer amigo y su propia enfermedad mental, además de luchar por encontrar un grupo de amigos y encajar.


No he tenido la suerte de leerme el libro homónimo en el que se ha basado esta película aunque lo tengo en mi estantería y no dudaré en echarle el guante cuando termine el tochámen de Choque de reyes. Aun así he disfrutado mucho de Las ventajas de ser un marginado, una película sencilla cuyo trío de actores es de lo más jugoso y con una banda sonora maravillosa.


El creador de una obra literaria sabe lo que hay que hacer a la hora de llevarla a la pantalla, y suele estar implicado  en el proyecto si la adaptación se lleva a cabo. Normalmente suele estar en el campo de la producción o del guión para dirigir y orientar a los encargados de la película. Esta vez, es el propio Stephen Chbosky quien dirige la película de su libro. Sinceramente no puedo hablar de puntos muy exactos entre película y libro, ya que como he dicho antes, intento devorar lo antes posible el segundo de Juego de Tronos para poder echarle un vistazo a Las ventajas de se run marginado. Aun así pienso que es una película llena de valores, pero que además intenta comunicarte esos valores desde todo tipo de vías, desde el amor, la amistad, la comprensión y la compasión, y a su vez desde el lado oscuro de ir a fiestas, tomar drogas, el sexo, los prejuicios de la gente ante la homosexualidad y los problemas mentales. Como veis, profundiza por varios caminos la vida de un adolescente marginado y sin amigos que sin comerlo ni beberlo consigue encontrarse con dos jóvenes locos que lo aceptarán y le darán un lugar. Uno de los aspectos más atractivos de la película es la banda sonora. Sin duda de las mejores que he escuchado, compuesta por temazos de los 70 y los 80. New order, Sonic Youth, The Smiths, entre otros...pero sin duda es David Bowie con su Heroes el que te encoge el corazón cuando pasamos por debajo del túnel en la camioneta de Patrick y Sam. No puedo olvidar tampoco el poder escuchar algún que otro temita del gran y estravagante musical de los 70 [POSIBLE SPOILER] Sí, hablo de The Rocky Horror Picture Show [FIN SPOILER]. La película, sencilla en apariencia, hurga más en todos lo sentimientos de los que he hablado antes con planos y secuencias muy personales, dándote desde la visión más oscura que persigue al personaje hasta la más colorida y llena de vitalidad.

Logan Lerman para mi antes era el niño bonito de ojos azules de grandes franquicias que apenas era expresivo, o por lo menos a mi no me llegaba. Hacen falta más películas pequeñas, íntimas, profundas, para que le coja cariño a un actor al que antes no le tenía tanto (véasse como ya dije Bradley Cooper en El lado bueno de las cosas). Charlie es un joven que acaba de empezar el instituto, y lo único que consigue el primer día es hacerse amigo de su profesor de literatura (Paul Rudd, siempre es un placer verte, querido Mike de Friends). No tiene amigos y nadie se fija en él, hasta que conoce a Patrick y Sam, otros dos marginados. Pero reconocerlo: el grupo de marginados es el más guay y divertido que hay. Todos hemos sido Charlie en algún momento de nuestra vida, no digáis que no. Yo la primera, y en algún sentido lo sigo siendo, aunque soy una mezcla de Charlie y Patrick: loca, a la que le encanta resaltar en algún momento y expresar lo que piensa sin importarle lo que piensen los demás o cómo la miren, como Pat, pero muchas otras veces reservada, tímida y seria, centrada en los estudios y volcada en los amigos que tiene, como Charlie. Logan Lerman se gana el amor del espectador, un público que puede que el joven de ahora no vea interesante una película como esta, sólo unos pocos privilegiados que no vivimos en Gandia Shore con Pitbull de fondo constantemente. También los adultos verán que, aunque la vida adolescente puede ser o no tal y como se presenta en el film, el personaje es tan humano, tan profundo y tan trabajado, que lo comprenderá al cien por cien. Parte de ese trabajo lo vemos en la pantalla por un Logan metido en cuerpo y alma en el papel, y que se merece toda mi aprobación y mi cariño.


Aunque tengo que ver Tenemos que hablar de Kevin, pienso que Ezra Miller es una de las jóvenes figuras más prometedoras que tenemos en el cine ahora mismo. El personaje de Patrick es muy complejo también, pero el cómo se desenvuelve Ezra y el ver lo fácil y ligero que lo hace parecer es toda una delicia. Patrick es otro marginado es sus últimos días de instituto, si es que logra ir aprobando todo. Despreocupado, nada estudioso, divertido y alocado, Patrick es el hermanastro de Sam, a la que protege y quiere a más no poder. Nadie lo sabe, pero Patrick es homosexual, pero no se siente acomplejado por ello, y la gente que realmente le conoce, sus amigos, no muestra discrepancias. Patrick es a mi parecer (por lo que veo en la película. Si hubiera leído el libro tendría una visión más profunda del personaje) un personaje condenado a sufrir pero también condenado a buscar siempre la felicidad. En apariencia es feliz, pero siente un dolor y un hueco en su interior que es difícil llenar. Sin duda alguna, Charlie estará ahí para ayudarle. Yo creo que Ezra ha sido el que más me ha gustado de toda la película, y luego Logan. Estoy impaciente por ver más travajos suyos, porque me encanta cómo trabaja y lo mucho que se implica en lo que hace, sacándolo todo del guión, del molde, y haciéndolo más grande, a su altura y más atractivo.

La pequeña Hermione Granger ha crecido y madurado, aunque es algo que ha estado haciendo a lo largo de las ocho películas de la saga Harry Potter. Sin duda es la que mejor futuro tenía ya previsto, porque las dotes actoriles que tiene esta chica son apabullantes. Puede que no sientas todo lo que siente Sam. Y digo puede porque es muy difícil no intentar profundizar en este personaje, porque también es muy complejo. Sam es la chica del trío de personajes, una persona ambiciosa, pero que necesita centrarse en los estudios si quiere conseguir lo que quiere. No tiene buena fama, pero le da igual, porque ha pasado página. A pesar de ello intenta ser libre, intenta sentir el aire sobre la cara, notar cómo le acaricia la piel mientras ansía volar al cerrar los ojos por debajo del puente cuando ve en la camioneta escuchando David Bowie. Es un personaje que quiere ser libre por encima de todo. Emma empatiza rápidamente con el espectador, y más aún con sus compañeros de reparto, porque donde esté ella se ve muy buen rollo.


No lo olvides: La escena de baile de Patrick y Sam y David Bowie bajo el puente. Un trío protagonista electrizante y una banda sonora que simplemente hace que te vengas arriba. Tiene escenas muy fuertes, muy potentes emocionalmente, y planos sencillos pero muy bellos. El cariño incondicional que le coges a Charlie, Patrick y Sam. Logan Lerman ha dado un cambio para mi que no me esperaba, y con el que quedo muy satisfecha. El final, si has sufrido durante todo el film por la cantidad de sentimientos que te rondan por todo el cuerpo, es una explosión de todo lo que has sentido: felicidad, tensión, tristeza, dolor...y mucho más. Se te juntará y no sabrás si llorar y reír a la vez de pura felicidad o tristeza.
Olvídalo: Puede que haya conceptos que no quedan del todo claros, pero que por supuesto en el libro estará mejor explicado.

Conclusión: Si la película me ha encantado, no quiero ni imaginar cómo estaré cuando lea el libro. Las ventajas de ser un marginado es sencilla, profunda, muy bien defendida por Miller, Lerman y Watson, y sin duda, enamora. Una película conmovedora y llena de sentimientos que no dejará indiferente a nadie por la cantidad de temas que explora.

NOTA: 9'5/10

2 comentarios:

Unknown dijo...

A mi tambien me falta leer el libro que lo leere cuando me libere de los que tengo por casa. Mi madre salio llorando del cine por la situacion de Charlie, los 3 lo han genial. Muy buena reseña

María dijo...

Yo leí el libro y tengo que decir que me encantó y que estoy deseando ver la película. Espero que sea fiel al libro, porque si no, no sé si me va a gustar.

¡Saludos!